viernes, 21 de diciembre de 2012

Crónicas del fin del mundo: Viernes donde nada pasó

Tuve la oportunidad de despertarme temprano por cosas del oficio, a medida que amanecía encontré un cielo despejado y un sol radiante, común en esta época del año por la sabana de Bogotá. Mientras transcurría el día, me imaginaba a todo un mundo incauto en realidad llenos de miedo o con expectativas de que mágicamente por designio de una piedra, sus vidas cambiaran. Mientras presenciaba una de las máñanas más tranquilas y hermosas que he podido disfrutar este mes. Al regresar a la ciudad, fué grande y grata mi sorpresa al encontrar algo calmada mi caótica tierra, la gente sonriente, las empresas y negocios celebrando su última novena del año (en contados casos), en realidad mi gran pregunta fué ¿cómo es posible que existan personas tan amargadas y pesimistas que en realidad crean ciegamente en que todo debe acabar? El día de mañana mi hermanita espera destapar sus regalos por anticipado, si fuera el caso de ellos le dirían que los polos se van a invertir o que los mayas dijeron que este es el cierre de algo o que se acaba el mundo según los supersticiosos... ¿vale la pena?.

Hoy fué un día con una sensasión muy bonita: paz; cosa que no fué predestinada por nadie. imagino a muchos creyendo que serán salvos y serán "mejores" porque el día de hoy hicieron yoga, fumaron marihuana o se unieron con mantras, imagino a muchos incautos con el afán de hacer algo parecido por miedo, lo hermoso es que vi a muchos hacer caso omiso a la superstición y por el contrario, esmerarce por hacer de este un día agradable. Creo que hoy se les pudo acabar el mundo a muchos incautos víctimas de la excelente publicidad que se hizo entorno a este asunto, muchos de los cuales se burlan de mi convicción católica pero que por su lado le tienen fe a una piedra o a un árbol; espero pacientemente a que salgan los primeros "defensores de la verdad" a decir que todo se malinterpretó desde un inicio y que en realidad ocurrirá en 4 o 5 años, espero también ver a los incautos, fieles feligreses de esta nueva, absurda y muy conveniente religión de la segunda década del siglo.

 
Vi gente riendo, vi personas compartiendo, familias jugando en el parque, adolescentes pasándo un buen rato, niños dichosos, vi un día de esos que siempre se necesitan (porfavor no se engañen más y no me vengan con que a esto se referían los mayas) vi gente viva, afrontando la vida como sólo se puede hacer, con los pies firmes y la mente enfocada. Soy conciente de un sin fín de cosas que deben de cambiar en este mundo, creo que lo que me diferencia de muchos de estos personajes es que no soy tan pesimista; puedo ver cosas amables, buenas y desinteresadas, actos coherentes y muchas otras cosas que me demuestran que la gente tiene esperanza en ellos mismos. El que quiere salir adelante o darle lo mejor a su familia, el que quiere que sus hijos sueñen en grande y alcancen metas, el que quiere estar bien, todos ellos son el argumento perfecto para comenzar a replantear en realidad si vale la pena invertir tanto tiempo en la publicidad del "fin del mundo", porque lo gracioso es que todos los que lo profesan se juran salvos y redimidos (si han estado leyendo mi blog sabrán que no soy admirador de esta gente). Pesimistas los llamo, amargados los llamo, no toleran que otros sean felices sin admirar su estilo de vida "natural y sencillo", hoy AGRADESCO a esas personas que pueden sonreir y sonreirse a diario sin andar tragando entero Pásenla bien CHAo.

Lo del Jueves

jueves, 20 de diciembre de 2012

Crónicas del fin del mundo: Jueves sobre ruedas

Lo interesante de tomar el transporte urbano en mi ciudad es que en medio de tanta indiferencia se pueden ver cosas grandes... para el que quiere verlas. Hoy decidí hacer esto en mi largo trayecto, cuando salí no pude evitar mirar al frente y ver a una mujer muy linda con quien compartía camino, curiosamente tomamos el mismo bus (ella subió antes que yo) y estuvimos a dos puestos de distancia, jamás cruzamos palabra. Junto a ella una niña que no encontró otro puesto cerca a la madre que uno tras ella. Cuando se fué desocupando todo, trataba de adivinar el destino de cada cual y qué tanto afán por llegar tendrían; uno a uno vi cómo se iban parejas, abuelas, hombres, mujeres... luego se bajaron la madre y la niña, se tomaron fuertemente de la mano, como cuidándose mutuamente y cruzaron la calle; al rato se bajo la linda mujer con la que compartíamos camino, espero que con quien se haya encontrado por lo menos haya dibujado una sonrisa por verla.

El turno me llegó a mi, decidí aprovechar el semáforo para cambiar de transporte, lo logré y tuve que viajar de pie. En un par de sillas se encontraban la señora con sus tres hijos, justo atrás un hombre que cualquiera lo tacharía de ladron, juzgando por la forma de vestir, pero si examinaban sus manos, tenía una bolsa con pan. EL popular "trancón" no se hizo esperar y como todo Bogotano en un bus, sólo pude observar por la ventana, mirar por dónde iba y a paso lento ir contando las cuadras que me faltaban para llegar. El hombre con la bolsa de pan se bajó y casi enseguida la familia de las dos sillas, me senté un momento y observé quién estaba a mi lado, un viejo con pantalón blanco y sombrero... al rato llegué a mi destino. Es un espacio de paso, provisional, en realidad para muchos saber de la gente que viaja con ellos no tiene utilidad alguna, pero cuando bajas eres otro que va para algún lado.

De regreso ya muy tarde, tomé un bus de los que tomábamos con mi mamá cuando tenía 8 años. Luego de hacer unas llamadas, veo subir a alguien conocido. Lo miré pero no lograba reconocerlo, lo miré nuevamente y derepente muchas imágenes llegaron a mi cabeza, este tipo subía a los buses a cantar vallenatos, después de un tiempo consiguió una grabadora de pilas y colocaba un CD con vallenatos, cantaba encima; tiempo después consiguió las pistas y ahora... grabó un disco, un video y se va para República Dominicana. Este hombre hizo de un espacio provisional en su espacio diario, por un momento me sentí demasiado ignorante, pensé en la linda mujer, en la señora con sus tres hijos, la madre y la niña, el viejo con sombrero... a los ojos de muchos personas del bus, a los ojos de este hombre personas, sonrisas, aplausos y muchos sueños. Cuando me bajé me di cuenta que no importa que tan largo sea el camino o cuánto tiempo tome en llegar, siempre se llega al destino, a mi me faltaba caminar otro poco más para poder descansar, pero lo que se que tengo en común con todas las personas de los tres buses en los que anduve hoy, es que sé que llegaré también. Los que miramos pa'l frente con deseos de avanzar y no los que esperan llegar con deseos de que se acabe todo... que malo que los mayas, los videntes, astrólogos, los milenaristas y sus publicistas no anden en bus. Pásenla bien CHAo

Lo del Miércoles                                                             Pensando en el Viernes

miércoles, 19 de diciembre de 2012

Crónicas del fin del mundo: Miércoles de "opresiones"

Es curioso cómo vivimos buscando responsables para todo, pero aún más curioso ver cómo queremos sentirnos oprimidos. En países donde en realidad han vivido (o viven) una verdadera opresión, la gente no se queja tanto, hace más. Ya lo había mencionado antes, pero hoy en día si no estamos en total deacuerdo con lo que "la gente inteligente y rebelde" piensa, estamos entonces en contra de ellos, muy fácilmente podemos ser señalados no sólo como parte del problema, sino como el problema mismo; el afán de buscar algo o alguien para ejemplificar todos los problemas, el hecho de que ahora queremos ser unos revolucionarios inconformes que sólo se indignan cuando se aburren (seamos honestos, desde que exista un plan para un fin de semana, todo está bien, somos capaces hasta de cambiar lo poco que nos queda por un fin de semana "entretenido") el asunto aquel de tener conciencia por momentos no es que ayude mucho.


Creo que vivimos en un constante fluir de doble moral, culpamos figuras de "poder" por nuestros problemas basándonos en errores garrafales que salen a la luz pública y que se incrementan por ser precisamente figuras populares, pero cuando esos errores garrafales nacen de nosotros, por algún motivo deben ser ignorados, sencillamente porque lo de los errores de estos "poderosos" es peor porque sus decisiones afectan a más gente (aclaro que no apoyo el descaro y la forma inescrupulosa con la que se toman decisiones en este país, desde sus "dueños" hasta sus dirigentes pasando por sus medios) ... resulta que las malas decisiones y hasta las agresiones son válidas sólo si se hacen en cantidades "nacionales", parece ser que cuando se hacen en cifras pequeñas no son válidas y no deben ni siquiera contemplarse. La policía, el ejército, los políticos, las decisiones egoístas, la avaricia, la irresponsabilidad, el cinísmo, todas estas y muchísimas más cosas suelen ser causas de indignación, pero cuando estas cosas nos benefician, es entonces el silencio lo que más nos distingue, sencillamente porque sólo tenemos boca para comer y acusar pero no para reconocer.


Creo que en el día de hoy puedo arriesgarme a decir lo que en realidad tiene la clave para "el fin del mundo" y es nuestra propia incoherencia, estamos tan obsesionados por mostrarnos como la solución que en realidad nunca la buscamos, somos nuestro propio problema y nuestro propio obstáculo, bien se ha dicho que "el mundo no se cambia con quejas sino con ejemplo" y que "la historia no se ha escrito con ideas sino con hechos" nos quejamos y señalamos problemas porque suele ser lo más fácil, en realidad hay muchos que están actuando por encima de todas las quejas o que simplemente han comenzado por ellos, aprendiendo a perdonar, aprendiendo a reconocer, a pedir perdón, corrigiendo errores y dando un ejemplo, uno positivo, NO repitiendo lo que ha ayudado a dañar o a herir... si después de esto nos quejamos, creo que falta bastante por aprender (de nosotros mismos) Pásenla bien CHAo

Lo del Martes                                                           Pensando en el Jueves

martes, 18 de diciembre de 2012

Crónicas del fin del mundo: Martes de caridades

Otro asunto que me gustaría traer a acolación, es la "labor humanitaria desinteresada" que se practica hoy en día. Si bien no me opongo a que se colabore, en que se ayude y que se pueda en cierta manera mejorar algo, creo que en ciertas ocasiones (la mayoría diría yo) es mejor guardar silencio y sólo hacer; creo que he comenzado a tomar cierto repudio por los trueques entre ayuda y aplausos. Para muchos la palabra ayuda se encuentra enmarcada en estratos bajos, comunidades sumidas en la miseria, lugares peligrosos y cualquier otro lugar que no sea "la comodidad de su hogar", en otras palabras: cualquier lugar donde las condiciones de vida sean inferiores a las que tengo; atención NO ESTOY DICIENDO que este porcentaje de la población no requiera de atención y colaboración, sólo digo que para muchos esto se convirtió en el estandar.

En esta medida, muchas personas utilizan este estandar como "vitrina", encontrando el acto humanitario como un cartón de Bingo, un pasatiempo más o simplemente un hobby ¿porqué lo hacen? alimentar el ego, demostrarle al mundo que aunque no les importe su propia vida, su salud, su familia, son seres humanos dignos de "admiración, depronto quieren retomar el asunto de las indulgencias e iniciar un abono, quizá hacen tan desdichadas a otras personas que necesitan publicar sus "actos heróicos" para poder dormir tranquilos, sea lo que sea que los mueva, será un gran misterio para mi.

La persona que sirvió desayunos un día a indigentes, no sin antes prevenirse de que no la roben, la que fué a jugar con niños de barrios populares pero nunca pudo abrazarlos plácidamente por miedo a los piojos, la persona que fué al ancianato pero que no tuvo tiempo de hablar con nadie... no interesa cuál sea, siempre sabremos lo "mucho" que hizo porque de alguna forma lo gritará a los cuatro vientos, se tomará fotos, grabará videos, nuevamente pregunto ¿porqué lo hacen? porque la persona más desafortunada que yo suele ser mi boleto a la "fama". Es como el que quiere ser humanitario vía facebook y nos inunda de imágenes con frases cursis, nos pide seguir su cuenta de twitter humanitaria, etiqueta a todos en sus miles de fotos de vacaciones por el mundo donde usa una camiseta o una gorra con el logo de la "fundación social" a la que pertenece... lo más triste es que siempre hay un millón de palabras y una modestia que si fuera comida acabaría con el hambre en África.

Ahora, ¿será que los mayas también tayaron eso en sus piedritas? digo, que habrían personas tan egocéntricas que se enorgullecen de ser "humanitarios" y tener "conciencia" sólo para mirar cuántos aplausos y cuántos comentarios pueden recibir acerca de sus heróicos actos. En lo que a mi concierne, la necesidad no tiene estratos o nivel de educación y mucho menos entrada económica (pregúntenle a los que rehabilitan jóvenes hijos de padres adinerados) y el mejor acto de caridad es el que permanece mudo pero contagia a otros, ayudar con lo que se tiene mas no con lo que nos sobra. Porque tengamos o no tengamos, porque seamos ricos o pobres, porque nuestra educación sea pública o privada, porque nos movamos en bus o en carro, este afán por ser aplaudido tomando como piso para su altar verdaderas necesidades, no debe ser aceptado  Si en verdad queremos sentirnos útiles para el mundo tenemos que dejar de pensar que todo gira alrededor nuestro, ¿para qué queremos un apocalipsis o un cambio del mundo si nosotros ni siquiera contemplamos la idea de cambiar? Gracias a esos personajes silenciosos y anónimos que no necesitan armar todo un evento entorno a sus quehaceres, gracias infinitas a los que ayudan sin discriminar (nuevamente piénsenlo en ambos sentidos) creo que la clave para ayudar a la humanidad es aprender primero a ser humano. Pásenla bien CHAo

Lo del Lunes                                                    Pensando en el Miércoles

lunes, 17 de diciembre de 2012

Crónicas del fin del mundo: Lunes incoherente

Iniciando semana, día dos de esta crónica. Después de un día largo cantando pude recordar varias cosas, entre ellas que una de las claves de este país es el desorden, en otras palabras, el caos nos permite ser jeje. Me voy a referir a Bogotá primero; si salimos toca estar cautelosos y atentos con los ladrones, porque si nos atracan nadie va a ayudarnos; si pensamos en llamar a un policía posiblemente por algún tipo raro de descarte, nosotros seremos los delincuentes; cuando tomemos un bus debemos ser testigos de: vendedores que ignoramos, mendigos que ignoramos, desplazados que ignoramos, indigentes que ignoramos, usuarios del transporte público... que ignoramos; si decidimos tomar un transmilenio el asunto cambia: empuje, suba, aguante y salga; si vamos caminando podemos ver al vendedor ambulante y al que esconde las dosis personales junto con los elementos robados... curiosamente le compramos al segundo; si alguien se santigua seguramente lo miraremos mal; si vamos a un parque a tratar de respirar y tomar un nuevo aire, alguien saca un cigarrillo.

Si viajamos por carretera todo pasa a ser un "paisaje por la ventana"; si vamos a un pueblo lo convertimos en una discoteca, un hotel, un motel, una caneca y hasta en una gallina de huevos de oro; si hablamos no escuchamos, si escuchamos no creemos, si creemos ignoramos (de nuevo, como en el bus); ahora bien, resulta que no existe problema más grande que el que nos afecta a nosotros, si nos quitan plata, si no podemos entrar, si no podemos salir, si no me dejan hacer, si no les gusta que hagamos... lo curioso es que el problema desaparece "en el mundo" por arte de magia cuando ya no nos afecta. Las vidas de muchos funcionan como una casa con goteras, el asunto es que ninguno quiere arreglarlas pero tampoco se quiere mojar.


Resulta que las convicciones de muchos son tan fuertes que sienten necesario que el otro las comparta y las profese a toda costa, su credo, su religión, su espiritualidad... partiendo del prejuicio (porque cuántos de los que leyeron eso no pensaron en la iglesia católica... resulta que no hablo de ella) siempre encontraremos y nos daremos las artimañas para encontrar una que haga quedar bien a la que nos gusta. Todos tenemos la razon y ninguno de nosotros se equivoca, pero la culpa de las cosas la tienen otros; la excusa puede ser cualquiera pero todos le quieren llamar libertad, la misma que usan más que un madrazo pero que le han achacado todo el sentido del mismo; nos escandalizamos por los robos, asesinatos e injusticias, por la falta de conciencia y el egoísmo, por la indiferencia y discriminación, pero resulta que todas esas cosas en nuestras manos pasan a ser "cualidades de admirar".

Pregunto entonces: ¿los mayas dijeron que las cosas acaban (cambian se reacomodan lo que quieran) este viernes? para mi hace mucho tiempo pasó y los mayas (los mismos que se acabaron por mano propia) no lo tallaron en ninguna piedra para que la gente lo "reflexione". Que sigan saliendo a la luz piedras talladas y "visiones apocalípticas", creo que ya nos cansamos de dañar todo y necesitamos otro pasatiempo (sarcasmo, hermoso y muy sincero sarcasmo)... los lunes son desgracia cuando en realidad ignoramos lo hermoso de iniciar otra nueva semana (irónico si lo pensamos desde el sensacionalismo del dichoso calendario) Pasenla bien CHAo

Lo del Domingo                                                   Pensando en el Martes

domingo, 16 de diciembre de 2012

Crónicas del fin del mundo: Domingo

Creo que seré breve. La verdad no soy ni amigo ni devoto ni mucho menos preso de las supesticiones, en realidad creo que me enferma ver cómo muchos que ni siquiera saben manejar su vida, esperan que mágicamente un mito cambie todo, pero qué decir, es la moda ¿no?. Creo que si los mayas, los aztecas, los muiscas, los chibchas, los tayronas, los charrúas y muchos otros pueblos indígenas latinoamericanos extintos pudieran ver todo este frenesí de locura y obsesión por sus tradiciones, quizá llorarían de tristeza; con indignación se habla de la conquista europea, pero lo que pasa ahora es peor, digan lo que quieran pero para mi esto es como descuartizar memorias.

Pero AY DE MI! por decir estas cosas, me dirán ignorante, porque como bien lo mencioné en otra entrada, hoy en día no estar de acuerdo es ser bruto (palabras más palabras menos), si digo NO estoy evidenciando mi "intolerancia" según los mismos intolerantes... a todo este boom gringo-noventero-espiritual le pregunto ¿en serio? es ¿EN SERIO? critican a católicos por creer en Dios y por reconocer pecados pero creen en árboles, piedras y viven condenados al existencialismo (el vacío no el de verdad) temerosos de que en realidad necesitan sus placebos orientales para vivir la vida plenamete, ¿ES EN SERIO? porque el comportamiento de muchos me hace sentir a la entrada de una "inquisición de la nueva tendencia" no tienen "institución" pero los manipulan todo el tiempo.


Gracias por esta Quino
Estoy algo cansado con este asunto la verdad, es absurdo con tinte estúpido que muchos de estos fanáticos religiosos (si, son fanáticos religiosos) pretendan cambiarlo todo profesando cosas que NUNCA han hecho nada por la sociedad colombiana, creyendo en mitos de-generados con el tiempo nacidos de malas interpretaciones, peores que una revista farandulera. Lamento mucho si hiero suceptibilidades, pero su "autonomía", "rebeldía", "irreverencia" y "diferencia" no son más que fantochería contemporánea. Algo cargado pero esto pienso hoy. Mis amigos supersticiosos, sigan esperando a que todo cambie, en el plano real aunque somos cada vez menos,  somos los que nos movemos por cambiar. Pásenla bien CHAo


                                                                                                          Pensando en el  Lunes

Hecho en Colombia y no sólo es café

Este blog nació hace 2 años ya, comencé incorporando lo mejor de otros blogs que tenía dispersos, luego seguí escribiendo cuanta cosa me cruzaba por la cabeza. Es cierto, lo he abandonado mucho, pero bueno aquí estoy. Este blog es para el que lo encuentre a decir verdad, pocos seguidores pero en alguna oportunidad varios se han tropezado con algo de lo que aquí se encuentra, para el que sin querer o por casualidad llegó, espero que le guste este escrito; hoy quiero hablar un poco de lo que mi país brinda en materia musical, Colombia es más de lo que muchos piensan, pero eso será tema para otro día.

La Gata Golosa - Fulgencio García

 
Un pasillo santafereño, tan cachaco como el ajiaco. Movido por cuerdas y danzas de salón, es imposible no pensar en Bogotá cuando se escucha. Me mueven recurdos de lugares y de calles que alguna vez dijeron más de lo que ahora son. Palabras de Santafé de Bogotá que se sirven en una taza de chocolate con queso campesino acompañado de las populares mogollas de la panadería del barrio. Desde el interior llega este ritmo.
 
 
La Guaneña - Neftalí Benavides
 
 
Al ritmo del Nariño, bambucos campesinos y fiestas en los pueblos, este tema me translada  a los campos, a las alpargatas y los bailes "brincaditos", las reuniones en las casas y las cocinas preparando comida para muchos. Esto no sólo es retórica, en realidad es todo un contexto que arroja como resultado composiciones y celebraciones.
 

El Bunde Tolimense - Nicanor Velazquez Ortíz
 
 
Es la tierra tolimense, son sus campesinos y sus ganaderos, sus ríos, su cielo, sus bambucos y torbellinos. Este tema particularmente es muy importante para mí, fué de lo primero que le aprendí a mi abuelo, oriundo de Armero, que donde esté espero, sonría cuando vea que lo canto cada que puedo; "pues mi rejo va a enlazar, la dulzura del amor, con la voz de mi cantar"
 
 
Adios mi llano - Arnulfo Briceño
 
 
Desde el Norte de Santander, nace un enamorado de los llanos orientales, compone a la hermosura de sus paisajes y a la tradición campesina, dijo adiós en el 89 pero demostró que con la música se puede ser inmortal. No hay nada como un amanecer llanero, los lecos de los ganaderos y los zapateos de las fiestas, bien dicen que el llano es lindo
 
 
El rey pobre - Jorge Veloza
 
 
De Boyaca y sus campos, el sabor de pueblo pueblo lo trae uno de los personajes más ilustrados de este país, ¿cómo dejar por fuera al maestro Veloza?, guitarra, tiple, requinto, guacharaca y mucho corazón son la receta para un merecido repertorio a todos los reyes del campo, la carranga fué un lenguaje que llegó al Madison Square Garden antes que otros muchos con renombre, dinero y fama en este país.
 
 
Fidelina - Alejo Durán
 
Entrando por la Guajira, pasando por Valledupar, bajando a la provincia, inundando la región Caribe, llega el vallenato y sus versos entre piquerías y décimas. Este es el ritmo que me acompaña bajando por el Magdalena, el de los grandes maestros, el de tradiciones, historias y amores, el que surge de un pedazo de acordeón y una bella melodía, el que abre la puerte y te sirve la comida, es el pueblo, la sabana y la provincia.
 
 
Asi la toca el indio - Gaiteros de San Jacinto
 
 
De la sabana del Bolivar viene la mezcla entre negro, indio y español que originó este ritmo, los montes de María y su tradición, la tierra de la hamaca, tejedoras y la zafra. Campesinos que tocaban la gaita para alegrar el final de sus jornadas, calma que inunda el lugar, cordialidad que abunda en la gente. Maestros, memorias y alegría, la yuca, el ñame y la carne, los cueros de chivos de los tambores... San Jacinto tierra hermosa.
 


La guerra patriota - Delcy Gil

 
Del Río Magdalena nace la tambora, de las cadenas de los esclavos y de los sentimientos de la rivera. Este ritmo me cruza el río y me lleva directo a San Martín de Loba. Con un gusto enorme comparto esta canción de una gran maestra y amiga, cantaora del río, Doña Delcy Gil ¡UY! que viva la tradición con esos tres golpes na' más.


A pilá el arró - Etelvina Madonado


Así como muchos se enorgullecen de lo que el blues ha dejado, los lamentos y los clamores de libertad también dejaron sus huellas en Colombia. Al ritmo de un tambor alegre y con voces llenas de historia, se alza el bullerengue contando relatos de vida, lucha y resistencia. Doña Etelvina ya no está con nosotros, pero queda su gigantesca herencia.
 
 
La Rebuscona - Pedro Ramayá
 
Hablando de Gaita y hablando de río, la flauta de millo también hace parte de todo esto, la cumbia que nos reconoce en el mundo entero y este sonido que me ubica en una rueda bailando con sombrero y velas. La melodía cumbiambera, la cumbia soledeña.
 
Kilele - Agustico Lozano
 

 
El litoral pacífico y su gente linda, la chirimía le pone gozadera, el porro chocoano, el levantapolvo, el sabor a pacífico, el borojó y el chontaduro, el río, el mar, la tierra donde no hay frontera ni país. El ritmo que pone el corazón a bombear y la sangre a circular, es identidad y raza y este, uno de muchos himnos.
 
 
Tranquilito - Gualajo
 
 
El piano de la selva y uno de los grandes; la marimba de chonta, instrumento lleno de historia, misticismo, río, mar... este es el sonido de Guapi, el sonido de la selva, la conversación de los tambores, el sentimiento por sus raíces. Las fiestas patronales, las jugas, los currulaos y los bundes, me transladan a tierras y momentos estáticos en el tiempo. Al maestro Gualajo gracias por compartir tanto.
 
 
Un breve y muy general paso por la tradición de mi país, desde el interior hasta sus cosras (si, porque es país de dos mares) no sólo hay café, hay variedad de vida, no existe la academia perfecta pero los maestros abundan. Con cariño y con respeto les comparto estos temas, pásenla bien CHAo


Si les gustó esta entrada, los invito a que le echen un ojo a estas otras:

El camino del Do Re Mi¿Porqué el Rock es parte de mi música?

Sin ser Bilingüe - El sonido del Rock nacional para mi

sábado, 15 de diciembre de 2012

A pesar de Todo...

Y entonces, el placer de lo que hago es suficiente para seguirlo haciendo... la verdad es que si, lo disfruto mucho, me divierto, me pierdo en eso y muchas veces creo que es todo lo que tengo. SOY músico, lo digo convencido, no estoy siendo pretencioso, sólo consecuente. Creo firmemente que un músico hace muchas más cosas que interpretar un instrumento majestuosamente o ser el centro de atención por su "increíble sensibilidad artística" si así lo fuera, creo que cualquier reproductor táctil puede ser un gran músico. LA PERSONA, hace música.

Me convenzo, me enamoro y me decepciono, me caigo pero sigo, "nadie nace aprendido" dicen por ahí, pero creo y quiero pensar que todos sentimos. Puedo ver recitales completos y conciertos donde no hay ni una mínima respuesta, puedo ver ensayos que mueven fibras y es allí donde encuentro música para los oidos, el alma y el corazón. Me gusta cantar, aunque no sea un gran trovador ni un artista de talla, trato de expresar, trato de sentir y sobretodo trato de ser honesto; me enorgullese ser nadie, un nadie que aprende, se equivoca, sigue aprendiendo y es feliz con lo que hace, mi pago está en el aplauso sincero, mi motivación viene del que no cree y espera mi caida.

Juzgar un libro por su portada es como juzgar un músico por su academia, o depronto por su "gran nombre", el que sólo interpreta con majestuosidad, para mi, es sólo otro instrumento; creo que el arte no se debe tratar como algo que pasa por pasar, debe ser algo tan humano como respirar. Disfruto lo que hago y no me puedo imaginar en un mundo donde no pueda hacer música, aunque muchos piensan en la cantidad de ceros a la derecha en el cheque, yo pienso en la cantidad de cosas que puedo escribir o en la cantidad de cosas que puedo cantar; no me interesa tener un estante lleno de trofeos o de premios, me interesa más tener un público y oidos que escuchen.

Algo corto pero quería sacar esto, elegí este camino porque quiero gritarle al mundo que existo y que también tengo algo que decir. Pásenla bien CHAo

Bajando estrellas

Resulta que este hombre suspiraba día y noche por la mujer dueña de sus sueños y descansos, solía mirarla disimuladamente cuando se cruzaban en el mercado, la saludaba sonriendo tratando de expresar todo lo que sentía y esperando que algún día ella lo decifrara, pero ¿qué lo detenía?  lo que detiene a todo hombre: el miedo a un NO; preferiría seguir suspirando a perder el placer de admirarla.

Luego de un día largo y difícil, camino a su casa la encontró sola contemplando el cielo, era una noche despejada, cubierta de estrellas y con una luna plena que iluminaba todo el lugar, él se acerco y decidió sobrepasar la barrera del saludo; hablaron, rieron, compartieron, se encontraron el uno al otro, se maravilló con su alegría y su luz, todo era casi perfecto... pero ella tenía otro plan, quería tener la magia de esa noche en su cajón, así que le pidió a este hombre una tarea algo complicada: quería una estrella, una de las miles de millones que adornaban sus noches, quería que este hombre (que le había mostrado su pleno y sincero interés) bajara una y se la regalara, todo porque lo había encontrado "único y especial". Él no se hizo menos y aceptó el reto, le aseguró que al final de la noche tendría su anhelada estrella.

Corrió a su casa y comenzó a buscar la escalera más grande que tenía, la colocó sobre el techo pero aún no alcanzaba el cielo, comenzó entonces a buscar muebles, cajas, sillas y las comenzó a colocar una sobre otra, luego de sacar todo lo que tenía en su casa y colocarlo en el techo, decidió comenzar a edificar una torre que le permitiera llegar al cielo, una idea algo loca, pero valía la pena. Entre tanta conmoción, sus vecinos lo miraban preguntándose ¿qué le ocurría?, pero era tal la decisión de este hombre que uno a uno comenzaron a colaborarle, en muy poco tiempo la torre sobre el techo de su casa era tan alta que acariciaba la luz de esas estrellas. Este enamorado tomó una red que tenía y subió tan rápido como pudo, al llegar a lo más alto se quedó inmovil con tal espectáculo, podría saludar a la luna si quisiera, pero no había tiempo; tomó su red y la lanzó, con ella atrapó unas pequeñas estrellas que de seguro convencerían a la mujer de sus sueños.

Al bajar, tomó un saco y lo llenó con las estrellas que había obtenido, corrió más rápido de lo que algún día se imaginó pudiera hacerlo, con cada pasó se imaginaba el millón de sonrisas que lograría obtener de dicha mujer, pero al llegar a la entrada de su casa la encontró con el idiota colorido del pueblo, el que trabajaba en divagar y conformarse, el que se disfrazaba de aves porque era muy cobarde para volar... él, con algo de confusión y un dolor a punto de estallar, se preguntó cómo ocurrió eso que veía, ella simplemente respondió que le pareció gracioso cómo la conquistó con una caja de cigarrillos y una cerveza, cosas que compró en la tienda cerca a su casa. Este hombre se destrozó y mientras eso sucedía observaba cómo ya no habían sonrisas ni luces en ella, observaba cómo ya había olvidado la magia de una noche y la había reemplazado por la dureza de un discurso... se dió la vuelta y antes de partir recordó entonces lo que tenía en sus manos: un saco lleno de estrellas; corrió y se lo entregó.

Ella lo recibió sin emociones ni gratitudes pero si con la incomodidad de que su idiota colorido del pueblo pensara algo bien de ella, así que le dió las llaves de la entrada y le dijo que guardara ese saco en el desván. Con tristeza este hombre fué hasta la entrada, ingresó, buscó el desván y al abrirlo ¡OH SORPRESA! encontró todas las sonrisas que diariamente él le regalaba al saludarla, estaban dentro de una caja que decía "cosas que recojo en la calle"; con mucho dolor este hombre colocó el saco lleno de estrellas junto a la caja, tomó un lazo que encontró y ató ambas cosas, tomó una hoja y escribió: "recuerdo del que me regaló la noche" y lo pegó en el saco, cerró el desván y se fué. Esta mujer jamás revisó el desván y su idiota colorido del pueblo la convirtió en una triste colorida del pueblo, el enamorado decidió subir todas las noches a su torre improvisada y charlar con la luna un rato.

MORALEJA: Hombres, Aún cuando construyamos torres, inspiremos a otros, bajemos la noche y acariciemos la luna por una mujer que lo pida, es muy probable que ella nos cambie por un idiota colorido que divaga, se conforma y se coloca alas postizas. Mujeres, si se quejan del desamor cuando la caja de cigarrillos y la cerveza se acaben, deberían revisar su desván, seguramente encontrarán una caja llena de sonrisas y un saco lleno de estrellas de alguien que, hasta conversando con la luna, no deja de suspirarlas. Pásenla bien y no me odien CHAo

 
 
Otros cuenticos:


lunes, 3 de diciembre de 2012

Cuando la Salud falla y la actualidad se descacha

Y aquí estoy, tratando de pasar de las 14 entradas por año, hoy con un fastidio en el estómago pero con ganas de escribir, pero la pregunta es ¿sobre qué?... inconformidades que no faltan, cosas que depronto a los pocos que lean les insulte y no les parescan (o sencillamente describa su estilo de vida). Aclaro que no quiero herir suceptibilidades y no me dirijo a un "alguien específico", sólo cosas que pienso hoy.

Mientras que el cuerpo me duele, hay mil cosas que se me cruzan por la cabeza, la "conciencia actual" es una de tantas (una que abarca muchas más) las palabras tabu, purismo, prejuicio, radicalismo, entre muchas otras no sólo han sido resignificadas sino también son usadas y practicadas por nuestros "nuevos rebeldes" y nuestros grandes "ilustrados" (antes de que se malentienda les recomiendo que se remitan a una entrada anterior: El ataque de los ilustrados) todo esto pasó de ser "el perseguido" a ser "el hostigador" pero bajo la excusa de no ser así.


Supongamos que de niños nos gustaba sentarnos a ver plaza sésamo mientras tomábamos chocolate con queso, ese recuerdo no sólo nos va a traer recuerdos y nostalgia, también nos conecta en cierta manera con algo de lo que somos (porfavor, no es una tesis de grado, sólo un ejemplo sacado de la nada) ahora, crecimos y alguien por ahí nos dijo que la leche y el queso son asesinato mientras que el chocolate es otra manera de borrar a nuestros indígenas (no me odien vegans, no me odien radicalistas) y entonces la solución es pasar a formar parte de esos que "tienen la razón" porque si seguimos haciendo ese algo que ya es tradición (en este caso tomar chocolate con queso) entonces estamos ayudando a que el mundo se destruya; si bien es cierto que uno sólo no puede cambiar el mundo pero se puede contribuír, creo firmemente que no se consigue "convirtiendo a la gente" a lo que "yo pienso" sino adecuendo lo que pienso a la gente (de otra manera me parece bastante egoísta), lo triste de todo esto es que las personas ahora renuncian frecuentemente a lo que creen, lo que son, lo que sienten por ese discurso común (si, dije que es común)

Cuando hago memoria de mi pre adoloescencia y de mi adolescencia, recuerdo lo que se solía hacer para ser un "rebelde", la clave era desobediencia; tener el pelo largo en un colegio religioso, usar la camisa por fuera, pasarse de las horas acordadas con los papás, usar gorras al revés, escuchar música que sólo "nosotros" entendíamos, esmerarse por NO ser un ejemplo a seguir, hablar de hierba, sexo, tabaco, alcohol, tener borracheras, cosas que en ese momento comenzaban a adaptarse pero no dejaban de ser "polémicas"... si nos asomamos por la ventana hoy en día podemos ver cómo, citando a mi mamá, "todos se tapan con la misma cobija" ahora todas esas cosas son normales y parte de la vida diaria, no son "malas" como muchos pensaban antes, es común ver gente de todas las edades usando drogas, cargando fósforos y cajas de cigarrillos en los bolsillos, quejándose de que "no hay plata" mientras que cada viernes sin falta pueden invertir en alcohol... como lo mencioné, eso no es malo ahora, es al contrario, totalmente aceptado (cuántos están pensando que "cada cual puede comportarse como quiere"???).

Para mi el problema es que parte de esta nueva realidad, de este pensamiento común (es común, así se comporta mucha más gente que las que nuestros "rebeldes" se imaginan, no se engañen) es el "constante ataque" a quienes no lo seguimos, es la nueva filosofía de "soy único y si no están conmigo están contra mi". Si digo NO a usar drogas, a tomar alcohol, a participar en las miles de marchas inconsientes y vacías, si digo NO a vestirme como árbol de navidad, a cambiarme el peinado, si digo NO a ser parte de un montón más, corro el riesgo de ser quemado por hereje, sólo experiméntenlo, vístanse de corbata en un lugar donde no es común, colóquense una gorra del ejército nacional, salgan con alguien y mencionen que no creen en el consumo y sólo vean cómo el prejuicio, el tabu, la censura, el purismo comienza a tomar forma en defensa de lo que ahora "es el siglo 21" seguir nuestros propios sentimientos, nuestro sentido común, nuestra razón sin importar encajar en algún grupo de "mente abierta" es juzgado y censurado por nuestros "rebeldes". El descache de la actualidad dice así: "seas lo que seas no seas tu mismo, eso nos tiene mal y nos llevara a la condena, piensa lo que pensamos, consume lo que consumimos, vístete como nosotros, admira nuestras ideas" tristemente la rebeldía se convirtió en otro par de zapatos.


Lo que propongo es que si de verdad quieren "ser diferentes" SEAN USTEDES MISMOS SIN PEDIR PERMISOS O APROBACIONES, el/la que les vende discursos no le importa nadie más sino él/ella mismo/a, sólo necesita gente que le diga que si porque bien lo dice el dicho: porque somos muchos somos machos.  Respeten y compartan, el que no los discrimina por ser ustedes no los va a someter a vivir de cierta manera, al final del camino quedarán los que los aceptaron como eran sin acomodarse a discursos. EL descache actual, creo yo, es que esas cosas que usé alguna vez de bandera para mostrarme "diferente" ahora es lo que concede y permite, ser diferente resultó ser lo que mis papás siempre quisieron en mi adolescencia, por esto mismo aplaudo a los que se han puesto de pié y han dicho NO, los que han aguantado prejuicios y han visto cómo la gente "comprensiva y mente abierta" se aleja de ellos sólo por decir que profesan una fe, que no quieren participar y estar deacuerdo con todo este "nuevo" sentido común. Aplaudo a los que se arriesgan a seguir siendo ellos mismos y decir NO a estas tendencias, no se rindan, no se dobleguen, NADIE tiene derecho a quitarles su identidad no se les olvide que "todos los seres humanos nacen libres e iguales en dignidad y derecho y dotados de libre razón y conciencia, deben comportarse fraternalmente los unos con los otros" lo dijeron hace mucho cuando redactaron los derechos humanos. Sigan diciendo NO, sigan siendo ustedes, porque ustedes (los pocos que han dicho NO) son los que algún día cambiaran todo esto. Sigo enfermo pero ya me desahogué, pásenla bien CHAo.